(Gálatas 5:16) Si el Espíritu Santo nos guía, entonces nos alejaremos de todo lo malo que desagrada y que nos contamina. El Apóstol Pablo fue tajante en reconocer la importancia de depender del Espíritu Santo en todo momento: Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne. Separados del Espíritu ningún creyente podría tener una vida fructífera espiritualmente. Cuando conocemos la voluntad de Dios, pero no la seguimos, estamos resistiendo a la obra del Espíritu en nuestras vidas (Hechos 7:51; 1 Tesalonicenses 5:19), y el tener un deseo de seguir nuestro propio camino, contrista al Espíritu Santo (Efesios 4:30).
Muchos hasta ignoran su poder y ni tan siquiera se toman el tiempo para dedicarle una oración. El Espíritu Santo nos enseña y nos guía mayo 25, 2019 Es inevitable que surjan diferencias entre los hombres. Después de todo, el Espíritu Santo no habla con palabras audibles. Una de las maneras más importantes para reconocer la guía del Espíritu Santo, es estar familiarizado con la Palabra de Dios. Someteos unos a otros en el temor de Dios. ¡La mano de Dios las guía de una manera segura y llevan en su corazón la tranquilidad y la paz, porque llevan la luz, porque el Espíritu Santo las mueve, porque van, por decirlo así, bajo la sombra de sus alas caminando triunfalmente por los senderos de la vida que han de llevarlas a la dulce eternidad! ¿Cómo podemos discernir entre nuestros propios pensamientos y su guianza? (Efesios 5:21), La Vida un Regalo Hermoso que Dios nos da.
Una de las maneras más importantes para reconocer la guía del Espíritu Santo, es estar familiarizado con la Palabra de Dios. Si entra en conflicto con la Biblia, entonces no proviene del Espíritu Santo y debe ser ignorado.
Como una brújula, el Espíritu Santo nos dirige exactamente por el camino correcto en cualquier decisión. El Espíritu Santo es el autor de la Biblia y, en consecuencia, usará la Palabra para guiarnos. Más bien, Él nos guía a través de nuestra propia conciencia (Romanos 9:1) y otras maneras apacibles y sutiles.
El pecado habitual nos hará pasar por alto lo que el Espíritu Santo quiere decirnos a través de la Palabra de Dios. Otra forma de saber si estamos siguiendo la guía del Espíritu es buscar señales del fruto del Espíritu en nuestras vidas (Gálatas 5:22). La Biblia contiene muchas exhortaciones y mandamientos. Y es inevitable porque todos somos distintos, tenemos biografías distintas, porque tenemos emociones diversas e intereses divergentes.
Se te ha enviado una contraseña por correo electrónico. Por favor, habilite el javascript para enviar este formulario, 15 minutos de paz y bendición eucarística, Espiritualidad en la pandemia del Coronavirus, Encuentro con Cristo – Comentario evangélico, Entrevistas breves al Padre Jacques Philippe. La promesa de Jesús se cumplió en menos de dos semanas después de Su ascensión, cuando el Espíritu Santo vino con poder sobre los creyentes en Pentecostés (Hechos 2). Si andamos en el Espíritu, continuaremos viendo que estas cualidades crezcan y maduren en nosotros, y también llegarán a ser evidentes para los demás.
Siempre tengamos el deseo de oír, de predisponer nuestro corazón y los deseos, a todo lo bueno, a obedecer y sobre todo a agradar a Dios. El honrar a Dios con nuestras vidas es nuestra responsabilidad. Más bien, Él nos guía a través de nuestra propia conciencia (Romanos 9:1) y otras maneras apacibles y sutiles.
Esto no sólo mantiene nuestros corazones y mentes abiertas a la guía del Espíritu Santo, sino que también permite que el Espíritu hable por nosotros: «Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. El Espíritu Santo nos guía | Capacitación Destino - YouTube
Es importante señalar que tenemos la elección de aceptar o no la guía del Espíritu Santo. El hombre como que se levanta de la tierra y vive en un mundo superior; la mano de Dios lo guía con seguridad, sin tropiezos, sin timidez y el hombre va caminando por los senderos que Nuestro Señor le marca hasta llegar a la cumbre de la perfección a que Dios lo ha llamado. Desde el momento de la salvación, el Espíritu Santo viene a morar en la persona que acepta a Cristo como Señor y Salvador. Pero ¿cómo podemos reconocer la guía del Espíritu Santo? Copyright 2020 Vida Nueva para el Mundo | Todos los derechos reservados.
Antes de que Jesús ascendiera al cielo, les dijo a Sus discípulos que enviaría a uno que enseñaría y guiaría a todos aquellos que creen en Él (Hechos 1:5; Juan 14:26; 16:7). Ahora, cuando una persona cree en Cristo, inmediatamente el Espíritu Santo se convierte en una parte permanente de su vida (Romanos 8:14; 1 Corintios 12:13). No sólo reparte dones espirituales de acuerdo a Su voluntad (1 Corintios 12:7-11), sino que también nos consuela (Juan 14:16), nos enseña (Juan 14:26), y permanece en nosotros como un sello de promesa en nuestros corazones hasta el día que Jesús regrese (Efesios 1:13; 4:30).